Un programa municipal diseñado para combatir las adicciones entre la niñez y juventud veracruzana, fue la pauta para que don Antonio (Tony) Chedraui Mafud se involucrara de lleno en labores sociales hasta llegar a declararlo su proyecto de vida; sin embargo, su calidez y don de ser humano se desarrolló desde su infancia y juventud.

Hijo único y con una formación en la que siempre privilegió a la familia y a los seres humanos de su entorno, hablaba de la felicidad, de los valores, de sueños y aspiraciones. Su deseo de mejorar su estado lo condujo a retomar un proyecto que pudo haber quedado en el olvido, pero que con su empuje logró que llegara a otros rincones de la entidad veracruzana.

Para Teresa Ríos Linares, directora de la Fundación Tony, quien en 1994 conoció al empresario, el carisma de Tony Chedraui Mafud hacía que todo lo que tocara “lo hiciera oro”. “Su feeling para los negocios era su experiencia de vida, si iba a una ciudad hablaba con el taxista…ese contacto con la gente, muy sencillo, identificaba a todos por su nombre, era el primero en llegar y se iba caminando a su oficina saludando a todos.

El contacto humano, era su visión de negocios…”, contó Tere Ríos. Sin embargo, eso no lo desconectaba de su vida familiar, pues resaltaba esa unión con sus hijos y nietos a quienes anteponía antes de otros asuntos que tuviera enfrente. “Para él la familia era muy importante, los valores, daba todo por su familia, por sus hijos, por sus nietos. Podía tener mil cosas, pero si había algo de ellos estaba ahí”.

Con esa visión humanista hizo soñar a otros, como a Tere Ríos, quien de ser colaboradora en administraciones municipales y con políticos, terminó por sumarse y continuar con ese sueño bien diseñado y en el que institucionalmente fue exitoso, pero que al concluir las administraciones tenían que volver a explicar y retomarlo, hasta que finalmente lo llevó a su empresa y lo hizo crecer con gente que respaldó esa visión y lo condujo a crear la Fundación Tony para que desde ese sitio continuaran con el proyecto Sé tu Amigo. “El programa Sé tu Amigo era no sólo decir qué son las drogas, sino hablar de la familia, los valores, bajo el esquema de pláticas y obras de teatro que hablaran de estos temas…”,

Prosigue en sus recuerdos Tere Ríos durante la entrevista para Orgullo Veracruzano. Recuerda que entre los proyectos en los que se involucró Tony Chedraui estuvieron el equipo del Águila de Veracruz y el futbol. Eso hizo que llevara a futbolistas y a beisbolistas a las escuelas, como parte de Sé tu Amigo para impulsar que los niños aspiraran a eso, a fomentar su visión en el deporte, pero también en otras actividades pues igual llevó a bomberos o policías, quienes hacían demostraciones de habilidades, ante el asombro de los pequeños.
“Acá era todo, presentarles un personaje, llevaban a los bomberos, metía la patrulla a la escuela, los niños empatizaban con eso y esa era la parte de gran valor, hablar del entorno y generar una nueva conciencia…"

Él quería reforzar esa parte, sentía que estaban las cosas más complicadas pero estaba convencido que esas acciones, sí daban resultados”.

Tony Chedraui Mafud era enemigo de la apatía o la mediocridad. “Le molestaba que la gente no tuviera sueños. Para que lo pudieran convencer que la gente trabajara con él, necesitaba química… el entusiasmo, las ganas, sin obstáculos mentales. Le chocaba que le dijeran no puedo, porque todo se puede…”. Por eso también se involucró con las pláticas que se ofrecían, el mismo preparaba a sus colaboradores y a jóvenes universitarios que hicieron su servicio social, impulsados con un proyecto de ayuda a otros seres humanos.

Esa visión fue legada a sus hijos, quienes ahora continúan con la Fundación Tony. “El programa Sé tu Amigo no hubiera llegado hasta donde llegó si él no hubiera estado. Si para él no hubiera sido un proyecto de vida hoy quizá el proyecto no seguiría adelante, que hoy sus hijos continúen este legado y crean en el programa, es la mayor prueba de su trascendencia en la filosofía heredada por Tony Chedraui Mafud, por ello seguimos adelante, no ha parado, no ha pasado nada porque ellos y yo sabemos que no le hubiera gustado y seguimos igual, como si estuviera porque sabemos que era su pasión”, retoma Teresa.

Fue un hombre empático y siempre apoyó a la población en necesidades derivadas de problemas de salud o discapacidad, entregaba apoyos sin necesidad de mostrarlo o ser protagonista.

En medio de su constante preocupación por la situación de su país, en el último tramo de su vida lo llevó a invertir tiempo aportando grandes ideas sumándose como fundador de la asociación civil Misión Rescate México que nace en Veracruz por iniciativa de Aldo Flores Pérez, Juan José Sierra Álvarez, Manuel Liaño Carrera, Edgar Chain Trueba, entre otros personajes de Veracruz y de otras partes del país, una organización enfocada a que la ciudadanía tome conciencia de su participación social activa para defender la democracia y sus libertades, iniciativa que nació con buena estrella y hoy opera en más de 20 estados de la república mexicana.

Tony Chedraui deja un vacío entre sus cercanos, para Tere Ríos es un dolor que no han superado, además de un tema sorpresivo. Su partida generó tristeza y Veracruz sin duda llora y recuerda a uno de sus mejores ciudadanos, pero a la vez está consciente de que el liderazgo de quien fuera presidente de grupo Tony sembró en tierra fértil y lo pudo constatar porque sus descendientes llegaron a vivir el duelo con sus empleados, compartieron la terrible noticia y les ofrecieron el pésame, porque esa fue la enseñanza recibida, la solidaridad, el trabajo en equipo, la búsqueda del bien común para vivir en un país mejor.